Critica: Birdman

Película: Birdman (2014)
Director: Alejandro G. Iñárritu

Teniendo en cuenta el galardón a mejor película obtenido durante la ceremonia de los premios de la academia celebrada en la noche de ayer, logro intuir que muchos de aquellos que aún no han ido a verla van a querer, al menos por curiosidad, ir a verla para saber de que se trata la película de cual está hablando todo el mundo el día de hoy. Por ello, y preocupado profundamente por el bienestar de sus finanzas a la hora de realizar gastos innecesarios, me permito darles la siguiente advertencia:
Bajo ninguna circunstancia vayan a ver esta película en las funciones de las 9 de la noche (o posteriores), a no ser que se hayan levantado a las 2 de la tarde de ese mismo día, les aseguro, se van a dormir Zzzzzzzzz.   

La razón, se trata de una película que maneja un plano de secuencia continua, es decir una única cámara en una toma ininterrumpida (realmente es una falsa toma continua, pero la sensación para el espectador es que efectivamente es continua), y si a esto agregamos diálogos complejos, profundos e irreverentes de manera frecuente se convierte irremediablemente en una fórmula más que eficaz para desmayar a más de uno. 

Sin embargo, si se logra disponer de un nivel de atención decente durante las dos horas de duración de la peli, (lo cual suena fácil pero no lo es tanto, ya que no son pocos los que buscan en el cine un espacio para descansar y relajar su mente, en vez de tener que exigirla y ponerla a prueba) podrán ser testigos de una impecable crítica directa y casi agresiva contra el mundo de la fama y las celebridades.

Acerca del casting, muy poco que decir, no porque no haya de que hablar sino porque fue tan maravillosamente escogido y demostraron un altísimo nivel interpretativo dentro de una película cuyo proceso de filmación no pudo haber sido de un nivel mas complejo y exigente, teniendo en cuenta la técnica con la que se filmó. Tres de ellos nominados a premios de la academia (Keaton, Stone y Norton), cada uno demuestra ampliamente las razones de dicha nominación. Lo anterior sin decir que el resto se hubiese quedado atrás, porque no es así.

Por último agradecer a Alejandro, aún sabiendo que nunca vaya a leer esto, por habernos regalado una obra tan increíble y maravillosa desde el punto visual y por recordarnos el nivel de superficialidad en el que se asienta el mundo en que vivimos.

Calificación personal: 9/10.