Director: Ciro Guerra
Orgullo colombiano...
Como buen colombiano acomodado me fui a ver "El
abrazo de la serpiente" después de conocer que había sido seleccionada
dentro de las nominadas al Oscar a mejor película en idioma extranjero. Aun
siendo consciente de que pocos podrán llegar a creerme, la verdad es que sí
tuve toda la intención de ir a verla cuando fue presentada por primera vez el
año pasado, pero por una razón u otra el par de veces en las que lo intenté,
simplemente no lo logré y hasta allí me llegaron las intenciones. Luego de
haber escuchado no hace mucho que se encontraba entre las 14 pre-nominadas al
Oscar fue grande mi desilusión por no haberle hecho la fuerza suficiente para
haber logrado verla en ese entonces, así que comencé a buscarla pero sin tener
mucha suerte. Cuando me enteré finalmente que había alcanzado a entrar dentro
de las últimas 5 finalistas, supuse entonces que la presentarían de nuevo en
cartelera y fue así como logré verla hace dos días en Cine Colombia. Y con
orgullo puedo decir... valió la pena.
La película, basada en escritos de investigadores etnobotánicos
extranjeros que visitaron la majestuosa selva del Amazonas durante comienzos
del siglo XX, abre una ventana que permite adentrarnos y explorar la fascinante
y desconocida, para la gran mayoría de nosotros, cultura ancestral de las
tribus amazónicas. Todo esto, acompañado de una bellísima historia de amistad,
desesperanza, redención, sabiduría popular, amores y odios entre los “hombres
blancos” e indígenas, que logra imprimir en los espectadores una sensación de pena
y tristeza al entender las proporciones y la profundidad del conocimiento y la
sabiduría indígena que nos hemos encargado de irrespetar y exterminar desde los
mismísimos tiempos de la colonia hasta nuestros días. Esto, llevado de la mano
en forma magistral y dedicando mucha atención a esos pequeños y grandes
detalles, por parte de Ciro Guerra talento colombiano quien ya me había
sorprendido gratamente en años pasados con “Los viajes de viento” (2009).
Una fotografía inmejorable como fácilmente podríamos
esperar de un largometraje filmado desde lo profundo de la exótica y mágica
selva amazónica y de la que podemos deducir el grado de complejidad que se tuvo
que haber alcanzado para lograr su producción.
Respecto a los diálogos y considerando que la gran
mayoría de estos son realizados en lenguas indígenas (con sus respectivos subtítulos
en español por supuesto), no llegan a volverse pesados e indescifrables, ni si
quiera aún después de las casi 2 horas de proyección, y si encierran mucho
contenido del conocimiento común producto de la intensa relación de respeto
entre la naturaleza y las milenarias etnias indígenas de esta región. Sin
embargo, no deja de ser una película que transcurre lentamente, tal vez como la
gran mayoría de cosas que pasan en esta selva, y que por lo profundo de su
contenido puede tornarse fácilmente en densa y no tan fácil de ver, sobre todo
durante la función de las 10 de la noche.
En resumen, un orgullo y una película casi que obligada para
los amantes del cine y sobre todo para los colombianos amantes del cine, que no
deben dejar pasar la oportunidad de ver esta obra ya ganadora en el festival de
Cannes y con la que podemos soñar con el primer Oscar colombiano de la
historia.
Calificación personal: 8.5 / 10
